Dictadura Ortega-Murillo se pronunció este miércoles contra las sanciones impuestas por Estados Unidos a 4 de sus funcionarios, entre estos su hija, Camila Ortega.
La dictadura destacó que estas sanciones son “ilegales y arbitrarias”.
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Sin embargo, desde el estallido social de abril del 2018, la policía Orteguista ha violentado los derechos humanos y civiles de los nicaragüenses. Apresando, forzando al exilio e implementado leyes que violentan y mutilan la defensa de los ciudadanos.
“El Gobierno (…) de Estados Unidos de Norteamérica acaba de pronunciarse (…) dictando medidas ilegales, arbitrarias, coercitivas y unilaterales contra ciudadanos nicaragüenses cuyo único delito es representar, muy en alto, la dignidad y el heroísmo de nuestro pueblo”, cita el comunicado emitido.
La administración presidencial destacó que estas sanciones son violatorias de instrumentos internacionales que rigen a los Estados.
De forma escueta, se pronunció también sobre las detenciones contra opositores y líderes de la sociedad civil en Nicaragua.
El Gobierno explicó que en estos días están siendo llevados ante la justicia “promotores y actores de golpismo (…) tal como lo demanda el pueblo nicaragüense”.