Sorting by

×

Un título universitario es un sueño para cualquier jóven en Nicaragua,  “el boleto” para ir tras el mercado laboral. 27 universidades cerradas y reabiertas con otros nombres, planes y aranceles, les ha puesto de cabeza los sueños a los universitarios del país.

“Ya mi bachilleré, ¿Ahora que sigue?”, se pregunta Sofía de 19 años. Soñaba con las aulas de derecho de la Universidad Centroamericana, UCA, pero ese nombre ya no existe. Sus instalaciones tienen “otro color” y apellido y no está segura si alguien la contrataría con un título bajo el nombre de la “Casimiro Sotelo”. “No es por quien haya sido este muchacho, sino por el manoseo a la universidad”, aclara.

Ella siente que el régimen ha truncado las aspiraciones de muchos jóvenes. Más de 27 confiscaciones de universidades solo son una señal de que algo anda mal. La última es una universidad de 60 años de prestigio, una de las mejores del país; la UCA.  

Estudiantes de último año como Sofía, anhelaban ir a la universidad, salir de casa, emprender ese viaje para conocer otros lugares, amistades y alcanzar su sueño profesional. Sin embargo, esta decisión conlleva un importante gasto para los padres de familias que en su mayoría los asume. “La pregunta es: ¿Valdrá la pena gastar en estas universidades?”, se pregunta.

   

Los costos  

Mantener a un estudiante universitario fuera de su ciudad es costoso.  Entre pagar el alquiler de casa o cuarto, mudanza, gastos de matrícula de la universidad, pasaje, alimentación y otras necesidades.  Un estimado indica  que un estudiante de fuera de departamento, invierte entre 5.000 y 7.000 córdobas al mes, si quiere estudiar en una cabecera departamental.

Según el detalle financiero de un estudiante del campo que ingresó a estudiar odontología en la UNAN-León, ha invertido un promedio de hasta 1.200 dólares en este año, un monto mayor al salario mínimo de un trabajador. Calcula que cada mes, se le asigna 2.000 córdobas para alimentación, y aproximadamente 150 córdobas para transporte.

Esto hace que el gasto aproximado al mes sea de 2.150 córdobas, eso sí, sin incluir el alquiler del cuarto de 80 a 100 dólares al mes, y otros gastos.

Este podría ser el caso de Francisca, que se bachillera este año en León  o de otro joven del sector rural que tendrá que dedicarle muchas horas al estudio para el examen de admisión y lograr un cupo en la universidad pública UNAN-León donde en el 2023, se matricularon 13 mil bachilleres, 10 mil de ellos lograron cupo y realizaron la prueba de habilidades y aptitudes,  pero solo 5 mil clasificaron para nuevo ingreso, al resto posiblemente, le tocó buscar “chance” en una universidad privada, una carrera técnica o alguna plaza laboral en su municipio.

Universidades estatales son pagadas

Las matrículas de 2024 en las universidades privadas de León, tienen un costo superior a las universidades públicas en Nicaragua. Aunque es difícil entender con el régimen de Daniel Ortega, hasta las universidades estatales se pagan.      Se puede establecer un costo medio de la matrícula trimestral  y mensualidad cerca de los  500 dólares al año, en el caso de la estatal Universidad Nacional “Padre Gaspar García Laviana”, confiscada a la extinta UCAN en León.  

Hay otras opciones disponibles para los estudiantes que buscan ayuda financiera para sus estudios universitarios en Nicaragua, ofrecidas por el gobierno, sin embargo, los beneficiados deben de estar muy vinculados a las organizaciones de estudiantes UNEN y el CUUN, afines al gobierno sandinista y deben estar disponibles a la hora del llamado para las actividades del partido, de lo que ya, muchos estudiantes están cansados.

 

Deja un comentario

WP Radio
WP Radio
OFFLINE LIVE
A %d blogueros les gusta esto: