Diez nuevas unidades de buses de origen rusos llegaron en mayo de este año a la ciudad de Estelí con la finalidad de mejorar el servicio colectivo, pero los usuarios, se quejan de que son conducidas por jóvenes inexpertos, que manejan temerariamente en las calles de esta localidad, además de llevar estruendosos equipos de sonido que estresan a los usuarios.
Estos diez primeros buses rusos son parte de una flota de 32 que según el gobierno, deben complementarse en los primeros meses del próximo año a la ciudad de Estelí a fin de sustituir las viejas unidades que circulan desde hace muchos años en esta localidad, dijo Denis Molina, representante del sector transporte de esta ciudad.
En Estelí, el sector transporte es integrado por un grupo de empresarios que se han declarado a fin al gobierno y que les han cedido el control del servicio de taxis, unidades urbanas, buses ruteados al norte del país y buses expresos a Managua.
Según quejas de algunos estelianos, los transportistas han puesto al frente del volante de estas unidades a jóvenes con poca experiencia para que conduzcan por las dañadas calles de los distintos barrios asignados en sus rutas dentro de la ciudad de Estelí. Añaden que quienes conducen a exceso de velocidad, realizan malas maniobras y generan frenazos inesperados que ya han causado varias personas lesionadas dentro de estos automotores.
Otro problema: música estridente
Otra queja de los usuarios, es que los choferes conducen las unidades con el volumen de sus equipos de sonido alto a los que les han agregado bocinas que aumenta “el estruendo”, pese a que es una prohibición expresa de la Policía y las autoridades reguladoras.
“Andan a unos jóvenes conductores que quien sabe como lograron sacar licencia de conducir y estos chavalos dan unos frenazos. Ya han habido ancianos que han ido a parar al piso, pierden (quiebran) sus lentes y salen lesionados y no hay con quien quejarse aquí en Estelí”, dijo Haniel Hernández Lazo, de 56 años, quien acostumbra a tomar rutas urbanas en esta ciudad.
“Mientras, los cipotes que andan de ayudante maltratan al usuario, son bien groseros con los ancianitos y para remate, andan esos sonidos que parecen cantinas que casi le revientan los oídos. ¿No es que eso era prohibido?”, preguntó el ciudadano.
“¿Mejorará?”, se preguntan
Estimaciones de funcionarios del área de transporte de la alcaldía esteliana consideran que a diario unos 6 mil 500 usuarios abordan estas unidades, aunque transportistas creen que pueden ser más, debido a que son centenares de trabajadores de las pureras y del Estado, que viajan en estos buses.

Las unidades recorren barrios como “El Rosario”, el más grande de Estelí, el “Oscar Gámez”, “Panamá Soberana” y el famoso barrio “Sandino”, entre otros puntos de tránsito importante como el hospital, parque central y las fábricas del tabaco como también comunidades cercanas al norte de esta localidad.
“Se creyó, porque así lo habían dicho los del gobierno y el alcalde pancho (Francisco) Valenzuela de que íbamos a mejorar el servicio público a la llegada de nuevas unidades de buses, pero existe un mal servicio que muy pocos nos atrevemos a denunciar, porque después, se nos acusa de atacar al gobierno”, criticó un poblador que solo permitió que se le identificara como Pedro José.
“Usted sabe que está jodido que ya ni criticar se puede porque lo meten al chipote (la cárcel política del régimen)”, agregó.
Las nuevas unidades tienen un costo aproximado de 70 mil dólares, la mitad es asumida por el Estado y la otra parte saldada en cuotas por los mismos transportistas, según expresó a la llegada de estas unidades a Estelí, el alcalde Francisco Ramón Valenzuela, y Denis Molina, representante de los transportistas estelianos.
Las actuales condiciones de las principales calles de esta ciudad representan también un desafío para la mejora del transporte. Ello ha sido reconocido por Orlando Castillo, jefe del área de transporte de la Alcaldía. «Nosotros tenemos una dificultad, que las calles de la ciudad son angostas, tienen seis metros de ancho, y muchas están deterioradas por la afluencia vehicular y por los tiempos de lluvias, pero trabajamos por mejorarlas«, se justificó.