El pueblo de Estelí no pudo salir en procesión con la imagen de Nuestra Señora del Rosario, pero pudo ver libre al padre Leonardo Guevara, encargado de la Catedral de esta ciudad y quien desde mayo, estaba en custodia del régimen en las instalaciones de El Seminario.
Según la dictadura, el secuestro del religioso y la especie de “casa por cárcel” en la que se encontraba, la motivó una investigación por supuesto lavado de dinero en su calidad de exdirector nacional de Cáritas, la oenegé de caridad católica anulada por la dictadura en el contexto de la guerra que le he declarado al clero nicaragüense. Sobre la investigación contra el religioso, los avances son hasta ahora desconocidos, ya que la policía del régimen se niega a informar públicamente sobre ese y otros casos.
Las autoridades locales del orteguismo, declararon este día como asueto con goce de salario para que los estelianos “pudieran celebrar” a la patrona, cuya imagen, irónicamente confinaron a la Catedral por órdenes de la dictadura. Hasta este sábado, los estelianos católicos esperaban que ante “tanta bondad” de la dictadura, se permitiera la procesión. Pero no, la prohibieron.
“Nos encontramos en comunión, en unidad en torno a Cristo”, expresó por su lado el padre Fruto Valle, quien saludó al padre Guevara, encargado de la Catedral de Estelí Nuestra Señora del Rosario, liberado por la dictadura esta semana, un saludo que los feligreses celebraron.
Festejan bajo represión
El padre Valle, está a cargo en estos momentos de la administración de la Diócesis, debido a que el obispo Rolando Álvarez, sigue encarcelado por la dictadura, tras su secuestro y condena ilegal a 26 años de prisión tras un juicio plagado de irregularidades y el que el mismo dictador Daniel Ortega, admitió como venganza política, al afirmar en conferencia de prensa que la condena se la había ganado el religioso por negarse al destierro en febrero pasado.
El pueblo católico de Estelí se congregó este sábado en la catedral Nuestra Señora del Rosario donde por tradición el clero se reúne con su Obispo para celebrar a su patrona la Virgen María, bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario.
No hubo procesión. Están prohibidas por la dictadura, pero el rezo de cada día de la novena estuvo a cargo de un colegio católico y este viernes, los estudiantes de Nuestra Señora del Rosario realizaron una actividad solemne con custodios en torno a la imagen de la venerada, que incluyó cantos y oraciones y aplausos “para mostrar la fe y la alegría de pueblo mariano”, dijeron feligreses.
“Es como si nos cargaron las baterías”, expresó doña Marta muy emocionada, una católica de 52 años que dice no se pierde una sola celebración a “la milagrosa del Rosario”, como le llamó. “No importa la represión, la fe nos vale”, señaló.
La Patrona sin su Obispo y sus sacerdotes
“Estuvo muy bellísima. Llegó la mayoría de estudiantes y la gente que llegamos normalmente y ellos (los estudiantes) desfilaron desde el atrio con cadetes de la banda y llevaban custodiada a la Virgen hasta el altar con la bandera del colegio, la bandera de la iglesia, la bandera de Nicaragua. Fue una actividad muy emotiva”, señaló doña Miriam, otra feligrés que viajó de una comunidad para estar en la celebración.
Por su lado, el padre Fruto Valle, mencionó que la Virgen “ha intercedido en los momentos más difíciles en la historia de la iglesia”. “Tenemos referencia de un Cristo orante que se comunica con el Padre y ruega por nosotros”, expresó el religioso, quién agregó que “a través del rezo de el rosario meditamos en los misterios de nuestro Señor Jesucristo, a través de su madre, quien ha intercedido en los momentos más dolorosos de la iglesia”, agregó.
En la misa solemne en honor a la patrona de la Diócesis de Estelí, faltó su obispo Rolando Alvarez y otros cinco sacerdotes más de esta diócesis que siguen secuestrados por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.